El atentado suicida perpetrado contra el aeropuerto de Sevaré, en el centro de Mali, dejó un balance de diez civiles muertos y 61 heridos, así como 28 terroristas fallecidos, según el balance oficial ofrecido por el Gobierno de transición del país.
En un comunicado, el Gobierno maliense informa de este ataque, ocurrido pasadas las cinco de la madrugada con “vehículos kamikazes” que intentaron atacar el complejo aeroportuario.
Fuentes de las autoridades locales explicaron que en el ataque explotó un vehículo de unas diez toneladas cargado con explosivos cuando se disponía a entrar en el recinto del aeropuerto, cerca de un puesto de la Gendarmería.
La explosión del vehículo destruyó parte de los edificios aledaños, según las fuentes, que afirmaron que durante el ataque se escucharon tres fuertes detonaciones seguidas de intensos disparos.
El aeropuerto que se disponían a atacar los terroristas es utilizado tanto por la fuerza civil como por la militar, y también por la misión de la ONU en Mali, la Minusma.